Los Choros, son una especie de hongo de increíble sabor que sólo nacen en la región de La Esperanza e Intibucá, Honduras. De nombre científico “Amanita Caesarea”, se conocía antiguamente como Amanita de los césares, huevo de rey o yema de huevo, en Honduras se conoce sencillamente como “Choro”.
Su apariencia peculiar y sabor único lo han convertido en la mayor atracción turística – gastronómica de la zona, esto los ha hecho merecedores de ocupar el lugar 11 en la lista de las 30 maravillas de Honduras. Se atribuye el origen del choro a Europa y el norte de África, no se conoce con exactitud la forma en que llegaron a Honduras. Tienen un píleo o “sombrero” que mide entre 8 y 20 centímetros, es de color anaranjado rojizo y de color amarillo en el tallo, algunas otras variedades de este hongo tienen un color azulado.
En los países europeos de donde es originario este hongo es considerado todo un lujo y puede llegar a costar hasta 100 euros el kilo. Los habitantes de La Esperanza e Intibucá han aprendido a reconocer el tiempo perfecto de llegada de los choros, estos aparecen después de las primeras lluvias de mayo y se mantienen por casi todo un mes (15 de mayo y 15 de junio aproximadamente), crecen alrededor de los pinos y robles de la región, cuando nacen, estos hongos tienen un parecido a los huevos de gallina.
Para que los choros puedan nacer necesitan también de la luz del sol, esto quiere decir que después de la lluvia debe salir el sol, si el sol no sale, no pueden aparecer los choros. Los choros fueron descubiertos por los indígenas Lencas de la zona, desde entonces este delicioso producto se hizo parte de su alimentación. Debido a su popularidad nace en esta región el Festival del Choro y El Vino, el cual se celebra todos los años entre el 22 y 25 de junio. El uso de este honguito es muy diverso, desde sopas, salsas, pastas, pupusas, anafres y un sin fin de preparaciones pueden ser ejecutadas con este tan especial insumo.
Dato curioso: En Perú, el Choro tiene un primo hermano llamado Hongo de Porcon, en honor al pueblo de Porcon en la provincia de Cajamarca al norte del Perú lugar donde nacen estos honguitos, debido a las mismas situaciones de clima y ambiente que permiten que aparezcan.